sábado, 5 de abril de 2014

Visita a la ganadería "El Montecillo"

El pasado 1 de marzo visité, junto a mis compañeros del Curso de Periodismo Taurino, la ganadería de "El Montecillo", propiedad de D. Francisco Medina, antiguo ganadero de la famosa ganadería "El Ventorrillo".
El día amaneció nublado y con lluvia, pero el tiempo no nos iba a impedir disfrutar de la velada taurina en el campo. Partimos hacia la finca, situada en la localidad toledana de Orgaz, con previa parada a desayunar y coger fuerzas. 

Cuando llegamos a la finca "El Montecillo" nos esperaba en la entrada de la casa el ganadero Paco Medina y su futuro heredero, su nieto David. Junto a ellos estaban Íñigo Crespo y Julián López, que acudieron a realizar un reportaje de la visita.

Un pequeñajo perrito de raza bodeguera española, nos recibió tambien cuando llegamos a las cuadrasde la finca. El cachorrillo era adorable, chiquitito y nos seguía a todas partes, por lo que también disfrutó con nosotros de la visita. "Figura", que así se llama el perrito triunfó, en honor  a su nombre, entre nosotros.


Los vaqueros fueron en busca de los toros que el ganadero tiene apartados para la corrida que lidiará en Madrid el próximo San Isidro, los corrieron para que entrasen a un cercado y pudiéramos fotografiarlos de cerca.

Los primeros ejemplares apartados para Madrid. 


Pregunté a D. Paco sobre la preparación de sus toros antes de San Isidro y me respondió: "la corrida y la novillada apartada para Madrid se preparan con intensidad corriendo tres días en semana". Asimismo, me interesé por la alimentación de los toros. Me contestó que la alimentación varía dependiendo de si es para las vacas o para toros que se van a lidiar próximamente.

Después corrieron la novillada, apartada en otro cercado y la subieron para que viéramos y fotografiásemos la bonita novillada. 

La novillada de El Montecillo para Madrid.








Tras haber observado los bonitos ejemplares utreros y cuatreños, disfrutamos de los momentos previos a la tienta con el novillero mexicano Luis David Adame, quien nos dejó coger sus trastos y después nos deleitó con un buen toreo de salón.



El tiempo nos respetó la parte más importante de la visita, la tienta. Salió de chiqueros una erala colorada con la que Luis David se sintió agusto, a la vez que el veterano ganadero iba corrigiendo y dando consejos al novillero. Paco Medina, estuvo además, apuntando detalles en la ficha de tientas. Mi compañera Claudia se atrevió a torearla al a limón con mucho arte.




Después el ganadero nos soltó una añoja, casi sin probar para que saliéramos todos los que quisiéramos. Sorprendieron muchos compañeros, que cogieron con gusto el capote y la muleta. 
La presencia femenina del curso estuvo también presente en la arena y nos atrevimos todas  y todos pero he de reconocer que me eché atrás en el último momento y me di cuenta que no valgo para esto, creo que se me da mejor escribir ;)
Aunque después me quedé con las ganas de no haber echado un paso al frente y haberme quitado la espina. Paco Medina se atrevió a darle unos pases a la vaca y quitarse también el gusanillo. 



Dada por finalizada la tienta, caminamos hacia la casa y un agradable y apetitoso olor a cocido calentito, nos recibió en el salón. Nos sentamos a comer y la comida estaba deliciosa, desde el pan hasta la fruta, y con hambre estaba aún más rica. Enhorabuena a la cocinera que preparó el cocido.


Con el estómago lleno, nos juntamos e hicimos un corro en el que obsequiamos al ganadero con un regalo y le agradecimos el trato y la visita. Comencé con la tertulia preguntando al ganadero las expectativas que tiene en la camada que va a lidiar este año y su respuesta fue: “que pegue un buen petardazo en Madrid”, echándose a reír. Los compañeros también preguntaron a Paco y yo aproveché el máximo tiempo posible en hacerle todas las preguntas que me iban surgiendo, a él y a su nieto David Medina, el futuro heredero de la ganadería: sobre la evolución de etapa como ganadero de El Ventorrillo y El Montecillo; sobre su opinión de la reapertura de La Venta del Batán; sobre cómo ha enseñado el oficio el abuelo al nieto…



Disfrutamos de una gran sobremesa y tras posar felices con D. Paco Medina para capturar el momento, partimos de nuevo hacia la capital.

Desde aquí dar las gracias a la familia Medina, y compañía, por el agradable y cariñoso recibimiento en su casa. Espero que nos veamos pronto y mucha suerte con la novillada y la corrida de San Isidro.


En el siguiente post podrán disfrutar de la visita a la Escuela de Tauromaquia de Madrid, en la Venta del Batán, y podréis conocer el estado del lugar, cuya remodelación ha transcurrido hace unos meses.

Espero que os guste el reportaje.

Paloma

2 comentarios:

  1. OREJA, . . . A SANGRE Y FUEGO

    “La mirada del torero, escudriña su sendero.”

    San Isidro, añeja fiesta,
    tauromáquía manifiesta,
    Plaza seria de Las Ventas,
    quedan atrás las afrentas.

    En la décima corrida,
    de la feria más querida,
    turno al sexto de la tarde,
    Joselito haciendo alarde.

    Hincado, porta gayola,
    se santigua, dice hola,
    larga cambiada a rodillas,
    perdiendo una zapatilla.

    Ya de pie, sobre la arena,
    capotero se serena,
    negro, listón, “Adobero”,
    tercio de varas, primero.

    Astado frente a caballo,
    pronto, presto como rayo,
    cuernos al peto, saludo,
    poca pica, sale crudo.

    Centro del coso, se anima,
    con quite de “zapopinas”,
    ovación, la más sentida,
    sabia afición, conmovida.

    Un brindis que llega al alma,
    montera en arena, . . . calma,
    “porra de sol” lo acompaña,
    en su misión por España.

    Grito, ¡viva Aguascalientes!,
    ganas de ganar ardientes,
    estatuarios muletazos,
    rígidos, enormes, bajos.

    Trincherillas, mucho aprecio,
    firmes pases del desprecio,
    naturales, zurda fina,
    al final manoletinas.

    Toro bravo, de fijeza,
    transmitiendo con realeza,
    Ganadería, “El Montecillo”,
    Don Paco Medina, . . . brillo.

    En el arte no hay engaño,
    dos mil quince, fértil año,
    día diecisiete de mayo,
    con el sable ningún fallo.

    Suerte pensada, atrayendo,
    la muerte fue recibiendo,
    no hubo duda, ni dilema,
    estoconazo en la yema.

    Lluvia de pañuelos blancos,
    en Madrid, aplausos francos,
    sudor y llanto de Adame,
    tal triunfo nadie reclame.

    Vuelta al ruedo con banderas,
    mexicanas, muy toreras,
    le va siguiendo los pasos,
    al Maestro Eloy Cavazos.

    Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
    México, D. F., a 17 de mayo del 2015
    Reg. SEP Indautor No. (en trámite)

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  2. OREJA, . . . A SANGRE Y FUEGO

    “La mirada del torero, escudriña su sendero.”

    San Isidro, añeja fiesta,
    tauromáquía manifiesta,
    Plaza seria de Las Ventas,
    quedan atrás las afrentas.

    En la décima corrida,
    de la feria más querida,
    turno al sexto de la tarde,
    Joselito haciendo alarde.

    Hincado, porta gayola,
    se santigua, dice hola,
    larga cambiada a rodillas,
    perdiendo una zapatilla.

    Ya de pie, sobre la arena,
    capotero se serena,
    negro, listón, “Adobero”,
    tercio de varas, primero.

    Astado frente a caballo,
    pronto, presto como rayo,
    cuernos al peto, saludo,
    poca pica, sale crudo.

    Centro del coso, se anima,
    con quite de “zapopinas”,
    ovación, la más sentida,
    sabia afición, conmovida.

    Un brindis que llega al alma,
    montera en arena, . . . calma,
    “porra de sol” lo acompaña,
    en su misión por España.

    Grito, ¡viva Aguascalientes!,
    ganas de ganar ardientes,
    estatuarios muletazos,
    rígidos, enormes, bajos.

    Trincherillas, mucho aprecio,
    firmes pases del desprecio,
    naturales, zurda fina,
    al final manoletinas.

    Toro bravo, de fijeza,
    transmitiendo con realeza,
    Ganadería, “El Montecillo”,
    Don Paco Medina, . . . brillo.

    En el arte no hay engaño,
    dos mil quince, fértil año,
    día diecisiete de mayo,
    con el sable ningún fallo.

    Suerte pensada, atrayendo,
    la muerte fue recibiendo,
    no hubo duda, ni dilema,
    estoconazo en la yema.

    Lluvia de pañuelos blancos,
    en Madrid, aplausos francos,
    sudor y llanto de Adame,
    tal triunfo nadie reclame.

    Vuelta al ruedo con banderas,
    mexicanas, muy toreras,
    le va siguiendo los pasos,
    al Maestro Eloy Cavazos.

    Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
    México, D. F., a 17 de mayo del 2015
    Reg. SEP Indautor No. (en trámite)

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